La melatonina, presente en las bebidas fermentadas, elemento esencial en la dieta
La melatonina es una hormona secretada en la glándula pineal que tiene numerosos efectos beneficiosos en la salud humana. Esta hormona es especialmente conocida por su función reguladora del ciclo circadiano del sueño y de los procesos biológicos que giran en torno a él.
Un estudio[1] , llevado a cabo por investigadores de la facultad de farmacia de la Universidad Católica de Murcia (UCAM), evalúala biodisponibilidad de esta hormona y los metabolitos resultantes en bebidas fermentadas como el vino y la cerveza, así como los factores que influyen en ella y los diferentes beneficios relacionados con el tratamiento con melatonina.
Este estudio explica que la concentración de melatonina en las bebidas fermentadas es susceptible a variabilidad dependiendo del proceso de fermentación de cada bebida, sin embargo, una de las principales conclusiones es su potencial relación con el beneficio de la salud humana. El estudio analiza el fuerte potencial terapéutico con el que cuenta esta prometedora molécula ya que ha mostrado que actúa en el organismo como antioxidante, neutralizando un gran número de moléculas reactivas, y modula indirectamente la actividad del sistema antioxidante enzimático endógeno. Debido a estas propiedades frente al estrés oxidativo, así como a la inhibición de diferentes vías inflamatorias y apoptóticas, se evalúa su efectividad para combatir patologías neurodegenerativas ya que ha mostrado efectos neuroprotectores in vitro y en modelos animales de la enfermedad del Alzheimer, Parkinson o Esclerosis Lateral Amiotrófica. Por lo que además de su papel como hormona reguladora de los ciclos circadianos, cuenta con numerosos beneficios en la salud humana como antioxidante, anticancerígena, inmunomoduladora y neuroprotectora.[2]
La alta concentración de esta molécula en
ya que, según indica el estudio, la concentración de melatonina en bebidas fermentadas como el vino y la cerveza varía de picogramos a ng/mL, dependiendo del proceso de fermentación. Por ello, estas bajas cantidades, dentro de una ingesta dietética, son suficientes para alcanzar concentraciones plasmáticas significativas de melatonina, pudiendo así ejercer efectos beneficiosos sobre la salud de los consumidores, siempre que este consumo sea moderado y responsable por adultos sanos.
[1] Marhuenda Javier, Villaño Débora, Arcusa Raúl, Zafrilla Pilar. “Melatonin in Wine and Beer: Beneficial Effects”. Molecules, 11 de enero de 2021
[2] Fernández-Mar, M.I.; Mateos, R.; García-Parrilla, M.C.; Puertas, B.; Cantos-Villar, E. Bioactive compounds in wine: Resveratrol, hydroxytyrosol and melatonin: A review. Food Chem. 2012, 130, 797–813. [Google Scholar] [CrossRef]