Se acerca el verano, y después de todas estas semanas de aislamiento, las ganas de salir más a tomar algo con los amigos, quedarnos después del trabajo a tomar unas cañas y el aperitivo, más eventos al aire libre… Y como bien sabemos, todos nuestros actos sociales siempre se acompañan de comida y bebida en abundancia.

Los aperitivos, el clásico terraceo en la ciudad… es perfectamente compatible con llevar una alimentación saludable, con cuidarnos incluso cuando buscamos mejorar nuestra línea o perder algo de peso. De hecho, siempre será más saludable permitirnos tomar unas tapas con unas cañas de vez en cuando, salir a merendar con el buen tiempo… que restringirnos todos estos pequeños placeres de la vida por miedo a ganar peso, a consumir puntualmente algo que sea menos recomendable.

Lógicamente, es importante que sepamos escoger bien esas bebidas y picoteos o tapas, sobre todo si somos de los que lo hacemos ‘demasiado’ habitualmente.

Los básicos de nuestra alimentación con el buen tiempo:

Cuando llega el buen tiempo apetece mucho más tomar platos fresquitos, más ensaladas, frutas, alimentos que pueden tomarse en crudo… Y nos alejamos de guisos, platos muy elaborados calientes… Por lo que os dejamos algunas recomendaciones para esta época del año:

• Mucha ensalada, verdura y hortaliza cruda: podemos aprovechar a llenar nuestros platos de vegetales frescos de todos los tipos y colores. Cuanto más colorido el plato, más antioxidantes estaremos incluyendo en nuestra dieta.
• Gazpachos y cremas de verduras frías: es el momento de innovar con cremas frías que apetecen mucho más y rellenar nuestros aperitivos o platos sin verduras con un buen gazpacho frío.
• Fruta: con esta época nos llega una amplia variedad de frutas que hay que aprovechar. Podemos tomarlas entre horas, de postre, en la ensalada van genial y le dan un toque fresco, en batidos de frutas caseros… ¡Aprovechemos a tomar más fruta, que en invierno suele dar más pereza!
• Legumbres: importante no olvidar las legumbres con los guisos y platos calientes. Las legumbres deben consumirse varias veces a la semana pudiendo optar por más ensaladas, platos fríos de verdura y legumbres, guarniciones de hummus con palitos frescos de verdura… ¡Que no desaparezcan hasta octubre!
• Boles entre horas de yogur, kéfir...: un snack ideal y muy saciante para el buen tiempo es coger un yogur, kéfir, skyr, yogur de soja… siempre sin azúcar, y rellenarlo de toppings frescos: fruta cortada, canela, chocolate negro… y tomarlo fresquito.
• Además, no olvidemos hidratarnos bien, sobre todo agua, pero podemos rellenar también con infusiones frías con hielo que dan un toque original

¿Qué podemos beber cuando salimos por ahí?

La bebida de elección en todo caso debe ser el agua. Pero al salir por ahí no siempre es lo que más nos apetece. Si estamos de tapas o aperitivo, podemos optar por el agua con gas en distintas opciones: con limón, con especias y frutas… ¡cada vez hay más oferta disponible! Y si preferimos otras alternativas podemos tomar de vez en cuando unas cañas fresquitas, e incluso si no queremos tomar alcohol, optando por la cerveza SIN.

El alcohol siempre debe consumirse de forma moderada y responsable en un contexto social como el planteado: no más de 1-2 cañas en general. Señalemos que una caña tradicional contiene unas 88 kcal y una ‘sin’ alrededor de 44 kcal.

Y si lo que hacemos es merendar, podemos optar siempre por un café, un batido de frutas natural (sin azúcar añadido)…. y té o infusiones sin azúcar al gusto de cada uno.

¿Y qué hacemos con los aperitivos y tapas que siempre tenemos presentes?

• Deberíamos intentar buscar opciones saludables y moderar el consumo de otros como fritos, rebozados y embutidos. Así, algunas buenas ideas serían: Aceitunas y encurtidos (estos últimos apenas tienen calorías).
• Marisco al natural o con limón como: unos berberechos, mejillones con limón…
• Hummus (mejor casero) con crudités de verdura como palitos de zanahoria, o colines de pan integral.
• Tostadas de pan integral con un poco de jamón serrano, de queso, vegetales, con anchoas y tomate…
• Banderillas de pescado.
• Puñadito de frutos secos, pero claro no los fritos y llenos de sal…

Y si salimos a merendar, cada vez tenemos más opciones saludables donde recurrir y tomar: un batido de frutas; una tostada con aceite y tomate, con jamón serrano…; un yogur/kéfir con fruta cortada, chocolate negro, frutos secos… que pueden estar deliciosos y ser muy saciantes.

En definitiva, podemos disfrutar del verano, pero sin que conlleve un descontrol de nuestra alimentación constante. Durante estos meses priorizaremos una alimentación saludable y fresca con abundantes verduras, hortalizas y frutas, además de aprovechar a movernos más y llevar una vida más activa con el buen tiempo. Y una vez ganado eso, podemos por supuesto, darnos nuestros caprichos y salir al clásico terraceo al sol.

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